Una vez superada la conmoción inicial provocada por el apagón de CrowdStrike, ha llegado el momento del análisis. Con independencia de si las empresas se vieron directamente afectadas o tan solo se llevaron un susto, una conclusión parece estar clara: muy pocos podían imaginarse un fallo a tan gran escala causado por un software que, precisamente, debía proteger los sistemas.
Sin Windows, sin red corporativa, sin correo electrónico
Como ya sabemos, el reciente caso ha tenido enormes repercusiones. Se activaron planes de crisis (allí donde existían) y los responsables de seguridad tuvieron que vigilar múltiples sistemas y procesos e ir restableciéndolos sucesivamente. Ahora bien, lo más importante en toda crisis es, y seguirá siendo, mantener una comunicación suficiente e ininterrumpida, tanto internamente como con socios y clientes. Sin embargo, suele suceder que, una vez la pantalla azul de la muerte aparece en el monitor, la mayoría de los empleados tienen dificultades para acceder a sus propias bandejas de correo. Y, si además se ha caído también la red corporativa, tampoco se podrá acceder a través del smartphone de la empresa.
Email Continuity: con independencia del proveedor y del dispositivo terminal
Una solución de Email Continuity completamente independiente de la infraestructura propia puede, cuando menos, mitigar el problema en tales situaciones. Por ejemplo, en caso de crisis, la solución de Retarus enruta los correos electrónicos automáticamente –y, sobre todo, ya desde el nivel de puerta de enlace– hacia una plataforma independiente en la nube. El proceso no depende de Microsoft, de otros hiperescaladores ni del proveedor de correo electrónico principal. A través de una interfaz de correo web, los empleados pueden acceder a buzones de correo web preestablecidos y permanecer comunicados a través de sus direcciones de correo electrónico habituales. En caso de emergencia y gracias a la sincronización continua y preventiva con Active Directory, en todo momento está disponible no solo el historial de correo electrónico propio, sino también la libreta de direcciones de la empresa.
Gracias a la intuitiva interfaz de usuario, no se requiere formación previa: basta tener el enlace y los datos de acceso. La interfaz de correo web es accesible en cualquier momento y desde prácticamente cualquier dispositivo con conexión a internet. Y por mucho que, en situaciones normales, el acceso mediante terminales privados no sea del agrado de los responsables de IT, una solución con acceso universal brinda una ventaja decisiva en los momentos de crisis si no son posibles otras alternativas. Por seguridad, el acceso solo se permite mediante una conexión cifrada y no existen posibilidades de exportación para los usuarios finales. Asimismo, está inhabilitada de forma predeterminada la sincronización con clientes de correo electrónico adicionales o locales.
Comunicación en caso de crisis
Naturalmente, una solución de este tipo no resuelve todos los problemas surgidos en relación con el incidente de CrowdStrike. No obstante, sí posibilita como mínimo algo que, por desgracia, muchas empresas afectadas echaron en falta en los últimos días: accesibilidad ininterrumpida y comunicación completa tanto hacia el interior como hacia el exterior.
Encontrará más información sobre la solución Email Continuity de Retarus en nuestro sitio web o directamente a través de nuestros expertos o partners.
Nota: la imágen del artículo es obra de reivax, usuario de flickr, y se halla bajo licencia CC BY-SA 2.0.